El té es la bebida más popular del mundo después del agua; ¡se beben 70.000 tazas de té por segundo! Aun así, a menudo, los cultivadores de té encuentran dificultades para conseguir tratos justos. Es por ello que estamos muy orgullosos de ser la mayor marca de té de comercio justo del mundo.
En 1994, Cupper se convirtió en la primera compañía de té de comercio justo del Reino Unido. 25 años después, Cupper es hoy la mayor marca de té de comercio justo del mundo. Al comprar té Cupper de comercio justo, nos has ayudado a recaudar más de 4 millones de libras en primas de comercio durante los últimos 25 años.
Comprar té de comercio justo contribuye a ofrecer a los agricultores y recolectores de té, al igual que a sus familias y comunidades, mayor seguridad, igualdad y mejores oportunidades. Además, eso es solo el principio.
El comercio justo defiende los derechos de los trabajadores y garantiza que los agricultores reciben un salario justo. Al adquirir nuestro té con arreglo a condiciones de comercio justo y al pagar por ese té el precio mínimo de comercio justo, pagamos una prima de comercio justo, que es un importe adicional que los agricultores y trabajadores pueden invertir en cualquier proyecto de su elección, con el fin de mejorar sus condiciones de vida en materia de educación, sanidad y vivienda.
Gracias al comercio justo, mejoran sus condiciones laborales y aprenden formas de mejorar su agricultura y de gestionar su entorno. También les permite asegurarse de que sus hijos están bien alimentados y van a la escuela.
Las comunidades pueden invertir en instalaciones de agua potable y hospitales, lo que contribuye a mejorar la salud y el bienestar de todos los miembros de la comunidad. Por lo tanto, elijas el té que elijas, asegúrate siempre de que sea de comercio justo.
Al elegir productos que lleven el distintivo de comercio justo, estarás garantizando que los productores han recibido un pago justo y un precio estable por sus productos, permitiéndoles así desarrollar su actividad y su trabajo para superar el umbral de la pobreza.
Creemos que la transparencia acerca de la procedencia de nuestro té contribuye a construir una cadena de suministro más sostenible, ya que empodera a todas las partes implicadas de la industria del té, desde productores hasta trabajadores y asociaciones civiles.
El té es un producto que exige una gran cantidad de mano de obra en su producción y es necesario contratar trabajadores que desempeñen tareas como recolectar, desherbar, podar y fertilizar; además de los trabajadores de las fábricas en las que se procesa el té. Más del 80% de los recolectores de té de Assam son mujeres.
Somos conscientes de la envergadura de este desafío, pero creemos que compartir información es la forma de demostrar que para nosotros es importante trabajar exclusivamente con plantaciones de té que priorizan el progreso de la comunidad y que se esfuerzan por mejorar la calidad de vida de sus trabajadores y sus familias.
A modo de ejemplo, en la región de Assam, solo compramos té a siete plantaciones que priorizan el progreso.